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Presidios antiguos camaradas, y amigos pueden ser corrompidos, y contribuir y los crimenes
lejos de evitarlos. La tropa solo deve servir quasi para contener los grandes desordenes.
9º.‐
Al toque de diana en las Plazas y al alba en los otros pueblos, se levantarán los
Presidiarios en todo tiempo, sacudirán sus petates, los colgarán en perchas a proposito se
peinarán y lavarán, rezarán y en seguida irán a sus respectivos talleres, faenas, ó trabajos. A
las doce se reunirán en el Presidio para comer los ranchos, y a la una en el invierno volverán
al trabajo.
10º.‐
Los Comandantes aumentarán las horas de descanso en verano, según la fuerza de los
calores, la intension del trabajo en que se ocupen y el ser al descubierto ó a la sombra; y
procurarán ademas que las Brigadas que trabajen en caminos, escabaciones, y en parajes
distantes, coman en ellos, y tengan tinglados quando falten edificios donde estar á la
sombra, ó cubrirse en las horas de descanso ó en los chubascos.
11º.‐
Al ponerse el Sol se suspenderán los trabajos, y se reunirán los Presidiarios en el
Quartel para pasar lista que presenciará precisamente uno de los Ayudantes, y á que
procurará asistir el Comandante: en seguida rezarán el Rosario, y comerán el segundo
rancho. Los Comandantes podrán variar en algun modo este régimen según las estaciones, y
trabajos.
12º.‐
A la hora de la lista de la tarde será quando los Presidiarios podrán libremente dirigir
sus quejas, ó pretensiones al Comandante, Ayudante, ó Capataz Mayor, que los oirán
afablemente, y atenderán si fuesen fundadas, teniendo siempre especial cuidado en evitar, y
corregir con rigor las venganzas que puedan tomar aquellos de quienes se han quejado.
13º.‐
Antes de salir los Presidiarios por la mañana se hará una nimia requisa del estado de
sus prisiones a presencia del cuartelero mayor, y Capataz de guardia y al toque de retreta
por la noche el Capataz Mayor hará, la requisa de las Quadras, y de todas las puertas del
Cuartel.
14º.‐
Se nombrarán tres Presidiarios de imaginaria en cada Quadra para que vigilen
alternativamente toda la noche, a fin de que no se apaguen las luces, ni haya desordenes de
los que serán responsables.
15º.‐
A la retreta se pasará segunda lista, se recojerán los que no lo hayan hecho, se
cerrarán las puertas, y se guardará un absoluto silencio. El Capataz de guardia será
responsable de las ocurrencias a que dé lugar por su falta de zelo, y no hacer cumplir las
órdenes.
16º.‐
En los dias de Misa que no lo fuesen de fiesta, solo se alternará el régimen oyendola
los Presidiarios antes de ir a los trabajos.